Es más común de lo que piensas. La automatización de hábitos o la falta de atención pueden llevarnos a cometer un error al llenar el depósito de nuestro vehículo. Si te ha ocurrido esto, te explicamos qué hacer para solucionar el inconveniente sin mayores complicaciones.

1. No enciendas el motor
El primer paso y el más importante es evitar encender el motor una vez que te has dado cuenta del error. Si arrancas el vehículo con el combustible incorrecto, podrías dañar seriamente el motor y otros componentes del sistema. Mantén la calma y evita el contacto con la llave de encendido.

2. No muevas el vehículo
Si ya has encendido el motor pero te das cuenta del error al notar que no funciona con normalidad, detén el vehículo inmediatamente (en un lugar seguro) y no lo muevas. Cuanto menos se mezclen los combustibles, mejor será la situación para tu vehículo y su motor.

3. Comunica el error a la gasolinera
En cuanto te des cuenta del error, comunica lo sucedido de forma inmediata al equipo de la estación de servicio. Los profesionales cuentan con procedimientos establecidos para este tipo de situaciones y podrán brindarte asistencia o consejos.

4. Llama a un servicio de asistencia
Si ya estás lejos de la gasolinera o no se puede resolver el problema, llama al servicio de asistencia para que te envíe una que remolque tu vehículo a un taller de coches. No intentes conducir el vehículo con el combustible incorrecto aunque estés cerca. Esto puede causar daños costosos.

5. Vacía el depósito y límpialo
En el taller, vaciarán completamente el depósito y lo limpiarán adecuadamente. Es esencial eliminar cualquier residuo del combustible incorrecto para evitar futuros problemas en el motor. También harán una revisión del sistema de combustión, los filtros y otros componentes para asegurarse de que no hay daños importantes.

Poner diésel en un motor de gasolina es más grave que hacerlo al revés, es decir, repostar con gasolina en un motor diésel. Los motores son diferentes entre sí y las propiedades lubricantes del diésel pueden causar daños a cilindros, pistones y otras piezas críticas en el motor de gasolina. El error opuesto (gasolina en un diésel) es menos problemático y costoso. Por este motivo, las boquillas de llenado de diésel son más gruesas que las de gasolina. La boquilla de diésel no entra en el tanque de gasolina. De esta manera, se reducen las posibilidades de error y se previene el error más grave de los dos.